Las apuestas de Lillo lo pusieron en aprietos, pero al final ganó.

Más por individualidades que por las apuestas de su técnico en el campo, Atlético Nacional superó en el último minuto a Millonarios, en el partido de la fecha en la Liga Águila. Con un marcador final de 3-2, los de Lillo pudieron respirar el aire de la victoria, luego de tener que empatar el partido en dos ocasiones, pues los azules siempre estuvieron arriba en el marcador.

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Esta situación no dejó contento al técnico español, quien tenía la presión de ganarle a un grande de Colombia, pues solo lo había logrado con el América de Cali (2-0) en el Atanasio. Además, los verdes llegaban de la eliminación a manos de Patriotas, en la Copa Águila.

Precisamente Juan Manuel Lillo, fue autocrítico con lo mostrado por el equipo que orienta y esto dijo:

“Siempre es bueno ganar, esto está clarísimo. Ganar de esta forma tan épica es muy bonito y nos sentimos muy bien, pero jugamos muy mal al fútbol. Con lo bien que juegan estos muchachos, jugamos muy, pero muy mal. No sacamos bien ni de banda: un saque de banda nuestro era una opción en contra”.

Además, el estratega compartió las enseñanzas que le dejó el juego de ayer sábado en la noche:

“Estuvimos más imprecisos de lo habitual, corrimos más nosotros que la pelota y jugamos con una ansiedad inhabitual. Dentro de la lección, que no debemos dejar de tenerla, es bueno saber que el que busca ganar olvidándose de jugar, lo más lógico es que pierda. Aunque ganamos, espero que no seamos tan tontos de mentirnos con el resultado”.

Redacción: Wplay.