Independiente Santa Fe, uno de los clubes más tradicionales del fútbol colombiano, ya conoce el camino que le espera en la Copa Libertadores 2025, después del sorteo realizado en Luque, Paraguay. El cuadro cardenal se enfrentará a Deportes Iquique de Chile en la primera fase del torneo continental. El primer partido se jugará en Chile, en el Estadio Tierra de Campeones. Sin embargo, el equipo tiene un serio problema logístico para la vuelta, que pone en duda el uso de su estadio habitual.
El partido de vuelta, programado entre el 25 y 27 de febrero de 2025, estaba originalmente pensado para celebrarse en el Estadio El Campín de Bogotá, la casa de los cardenales. Sin embargo, debido a que el 26 y 27 de febrero coinciden con los días en que se realizará un concierto de Shakira en el coloso de la 57, Santa Fe no podrá hacer uso del estadio para este crucial partido.
¿Cómo afecta este problema a Santa Fe en la Copa Libertadores?
Este inconveniente con el Estadio El Campín no solo afecta la logística del club, sino que también pone en riesgo la ventaja de jugar como local en un escenario conocido. El partido de vuelta será clave para que Santa Fe avance a la siguiente ronda del torneo, y el cambio de sede podría influir en el rendimiento del equipo, que además estará jugando contra un rival internacional con el que no tiene mucha historia.
Los cardenales se encuentran en una situación delicada, ya que este tipo de problemas logísticos pueden ser un factor determinante en competencias tan exigentes como la Copa Libertadores. La directiva del club, encabezada por el presidente Eduardo Méndez, ya está buscando una solución lo más rápido posible, para garantizar que los jugadores no se vean afectados por este cambio imprevisto.
Aunque el equipo sigue enfocado en el certamen, la incertidumbre sobre el lugar del partido ha generado algo de preocupación en los hinchas, que esperan que la directiva encuentre una respuesta eficaz y rápida.
Santa Fe deberá adaptarse rápidamente: ¿Techo o Tunja para el partido de vuelta?
Con el Estadio El Campín fuera de circulación para este crucial encuentro, Independiente Santa Fe tendrá que elegir rápidamente una nueva sede. Techo, en Bogotá, es una de las alternativas más probables, dado que es un estadio más pequeño pero adecuado para partidos internacionales. Otra opción sería jugar en Tunja, que podría ofrecer un ambiente más neutro y con condiciones favorables para los jugadores.
Cualquiera que sea la decisión final, Santa Fe deberá adaptarse lo más rápido posible, ya que el partido de vuelta podría ser el factor decisivo para avanzar a la siguiente fase de la Copa Libertadores 2025. En este tipo de competiciones, donde cada detalle cuenta, la organización es clave para que el equipo no se vea afectado por factores externos.
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