A pesar de su buen regreso al fútbol argentino, Sebastián Villa no continuará en Racing Club. El club argentino decidió no contar con el colombiano por problemas extradeportivos relacionados con su proceso legal por maltrato y abuso.
Sebastián Villa, el delantero colombiano, había despertado el interés de varios clubes en Argentina tras su buen rendimiento en el fútbol argentino con Independiente Rivadavia durante parte de 2024. Uno de los equipos que lo estaba siguiendo de cerca era Racing Club, campeón de la Copa Sudamericana 2023, que había mostrado interés en sumarlo a su plantilla para la temporada 2025. Gustavo Costas, entrenador de la Academia, había dado el visto bueno a su posible llegada, pero la directiva del club decidió dar un paso atrás y descartar al colombiano.
Según información del medio argentino Diario Olé, el principal motivo para que Racing no firme a Villa fueron los problemas extradeportivos que arrastra el delantero colombiano. Villa sigue enfrentando un proceso legal en Argentina por una denuncia de maltrato a su expareja, Daniela Cortés, además de una denuncia
por presunto abuso sexual. Aunque desde lo deportivo no hubo ninguna discusión sobre sus capacidades, la dirección deportiva del club de Avellaneda optó por no contar con sus servicios debido a estos antecedentes legales.
«Desde lo deportivo no hay discusión, pero la dirección deportiva analiza mucho más que eso y no entra en los planes del club», mencionó Diario Olé, confirmando que el futbolista no será fichado por Racing en 2025.
Sebastián Villa, quien comenzó su carrera en el fútbol profesional en Atlético Nacional de la Liga Colombiana, ha tenido una carrera marcada por sus altibajos tanto dentro como fuera de la cancha. Tras su paso por Boca Juniors, donde dejó una huella futbolística, su vida extradeportiva ha afectado seriamente su carrera, generando dudas sobre su futuro en el fútbol profesional.
Racing declina la opción por problemas extradeportivos
La decisión de Racing Club de no fichar a Sebastián Villa tiene que ver con una evaluación profunda de su situación personal. La denuncia por maltrato hacia su expareja, Daniela Cortés, y la acusación de abuso sexual que aún está en proceso legal en Argentina, pesaron más que sus capacidades deportivas. La directiva de Racing dejó claro que, a pesar de la aprobación de Gustavo Costas, el tema legal fue determinante para no darle el visto bueno al fichaje del colombiano. En este sentido, Racing prefirió no asumir el riesgo de vincularse a un jugador cuyo proceso judicial aún no tiene resolución, priorizando la estabilidad institucional y su imagen pública.
Además, la situación de Villa ha causado controversia en la opinión pública, lo que obligó al club a replantearse su estrategia a largo plazo. El escándalo extradeportivo podría haber perjudicado no solo la relación con los hinchas, sino también la armonía dentro del vestuario, algo que los directivos de Racing no estaban dispuestos a arriesgar.
El impacto de los problemas extradeportivos en la carrera de Villa
Sebastián Villa ha visto cómo sus problemas fuera de la cancha han afectado su carrera profesional. A pesar de su talento y la oportunidad que le dio Independiente Rivadavia para volver a mostrar su nivel en 2024, las denuncias en su contra han complicado su regreso a los primeros planos del fútbol argentino. Racing Club, que buscaba un refuerzo para su ataque, prefirió no arriesgarse a incorporar a un jugador con un proceso legal pendiente que podría poner en riesgo la estabilidad del club y su imagen. Este tipo de situaciones también han generado dudas entre otros equipos potencialmente interesados en el delantero colombiano, dificultando aún más su retorno al fútbol de élite en Argentina.
Además, la situación de Villa abre un debate sobre cómo los clubes gestionan no solo el rendimiento deportivo de los jugadores, sino también su comportamiento fuera del campo. El caso de Villa resalta la importancia de evaluar a los futbolistas de manera integral, considerando tanto su desempeño en los entrenamientos y partidos como su conducta personal, especialmente cuando la reputación de un club puede verse comprometida por comportamientos extradeportivos.