El partido comenzó con mucha intensidad en Anfield, donde Liverpool recibió al París Saint-Germain para decidir quién avanzaría a los cuartos de final de la Champions League. Los locales, con Luis Díaz como titular, tomaron la iniciativa desde el primer minuto, creando algunas ocasiones de peligro. Sin embargo, la visita sorprendió al minuto 12, cuando Ousmane Dembélé aprovechó una jugada colectiva iniciada desde su propio campo para igualar el marcador global, dejando la serie empatada 1-1.
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A partir de ahí, la dinámica del juego cambió, ya que Liverpool intentó reaccionar, pero no logró concretar sus opciones ofensivas. La primera mitad terminó con la sensación de que los reds no lograban imponer su juego, y la presión aumentaba para los de Arne Slot. Con el empate global, ambos equipos sabían que cualquier gol podría ser determinante para evitar ir a una definición por penales.
Un gol anulado y la falta de puntería de Liverpool
En la segunda mitad, Liverpool salió a buscar el gol que les diera la clasificación, con Luis Díaz involucrado en el ataque. Al minuto 53, Diego Jota filtró un pase preciso a Luis Díaz, quien llegó solo frente al arco y marcó lo que parecía ser el gol de la victoria. Sin embargo, el árbitro anuló la jugada por un fuera de lugar del colombiano, lo que dejó a los locales con la frustración de no poder concretar el gol que tanto necesitaban.
A pesar de controlar la posesión y generar más llegadas que su rival, el equipo inglés no logró capitalizar las oportunidades. El tiempo avanzaba y la ansiedad de no conseguir el gol aumentaba en Anfield, lo que obligó a que el partido se fuera a tiempo extra para definir al clasificado a los cuartos de final.
Definición por penales: PSG se impone con la figura de Donnarumma
El tiempo extra no logró quebrar el empate global de 1-1, por lo que la serie debía resolverse desde el punto penal. En la definición, Gianluigi Donnarumma, el arquero de PSG, se erigió como el héroe al detener dos disparos de los jugadores de Liverpool, lo que terminó por darle la clasificación a su equipo con un marcador final de 4-2 en los penales.
El resultado fue un golpe duro para Luis Díaz y los suyos, quienes habían trabajado arduamente para defender su ventaja, pero no pudieron concretar en los momentos decisivos. PSG, por su parte, avanzó a los cuartos de final y dejó a Liverpool fuera de la competencia en una edición de la Champions League marcada por grandes sorpresas.
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